Constantinopla
Dice Eduardo Galeano, que andan
diciendo por ahi que estamos hechos de átomos, pero que él está
totalmente convencido que estamos hechos de historias. No sé. El sabrá.
Esta historia sigue la narración mucha mas bella de Isaac Asimov sobre "Constantinopla, el imperio olvidado".
Se me ocurre a mi, que Constantinopla comenzó llamándose
como se llamarban todas las ciudades de la Helade de aquel entonces:
alguna cosa seguida del sufijo polis, como acostumbraban a hacerlo los
griegos, ya que polis, significa ciudad, de allí la política es la
ciencia que estudia las cosas de la ciudad.
Aristóteles -el estagirita- llegó a
sostener que el único lugar donde había hombres era en la polis,
fuera de esta solo había animales y dioses.
Aquella sí era una época interesante
para ponerle nombres a las cosas, puesto que no lo tenían, como en
la Macondo inicial.
Ahora todo tiene nombre y se torna mucho mas
difícil acostumbrar a la gente a cambiar de parecer y nombrar a la
mariposa con el mucho mas bello nombre basko Pinpilimpausa, por solo
citar un sustantivo entre miles o millones.
En esas dos disciplinas, los antiguos
griegos eran muy buenos, narrando y nombrando cosas.
Lo cierto es que como la fundó el rey
Bizas, no tardó en ser re bautizada Bizanzio, por estas rarezas de la historia.
El pobre de don Bizas, se encontró en
un difícil trance, la población de su ciudad natal Mégara estaba
destinada al estancamiento al estar emplazada entre super ciduades de
la época, Corinto y Atenas.
La opción poco feliz hubiera sido
trabarse en lucha con sus enemigos, pero como vislumbraba una derrota
inminente la opción mas honrosa fue emigrar con los suyos, no sin
antes acudir al oráculo de Apolo en Delfos. La pitonisa
acostumbraba a encriptar bastante sus dichos, hay quien sostiene que
lo hacía solo por diversion, aunque el revisionismo histórico
parece otorgarle mas entidad a los tóxicos que ingería para
establecer su comunicación con el mas allá.
Lo cierto es que siempre hay un tóxico en la comunicación con el mas allá.
Lo cierto es que esta buena mujer le
dijo al rey Bizas que navegaran al oriente y se establecieran frente al
pais de los ciegos.
Bizas rascándose la cabeza compartió esta
buena nueva con sus hombre y zarparon hacia oriente inquietos
tratando de descifrar la premonición del oráculo.
Debe ser totalmente imposible un pais
donde todos los habitantes sean ciegos.
Después de unos días de navegación
se detienen en la rivera oriental del Bósforo, son atendidos
por los ciudadanos con la mayor de las atenciones, fiel al espíritu
hospitalario de todas las ciudades de la federación, al emprender el
viaje al dìa siguiente, cruzan a la ribera contraria y se encuentran
con un fondeadero natural, en una gran bahia, una península se
interna mas allá de esa bahía protegida por un cordón montañoso detrás y
“como si esto fuera poco” regada por la salida de un río que
posteriormente llamarán la Cornucopia, el cuerno de la abundancia,
que solemos ver grabado en muchas ilustraciones cuando nos referimos
a algo muy abundante. Como el escudo nacional argentino.
Así de benévolo era ese río.
Evidentemente, pensó don Bizas, la gente
de enfrente son ciegos si no vieron este lugar, pensó, o eso nos
gusta pensar que pensó, que es casi lo mismo, porque la historia es
bella per se.
Lo cierto es que sucesivos reyes
después de Bizas contribuyeron agregando mas fortificaciones a las
naturales y pronto Bizanzio se convirtió en una ciudad próspera en
virtud del “peaje” que cobraba a quienes quisieran pasar el
estrecho que da del Mediterráneo al mar de Mármara y el mar Negro, o viceversa, por un lado. Por
otro, en un sitio dificilmente atacable por el enemigo por no decir imposible. Los bizantinos tuvieron esa noción presente en todo
momento y de hecho Constantinopla cae en poder de los turcos mil años
después que Roma.
Es por ello que parte de la doctrina sostiene que es tal vez erroneo pensar que el imperio
romano cayó en 476, porque Bizanzio continuó siendo próspera y
pujante mucho tiempo después de la caida de Roma, manteniendo
misiones diplomáticas con reinos distantes como la India mientras
toda Europa era un villorio de calles de barro.
Bizanzio resistió los embates de sus
guerreros vecinos avaros, vándalos, la mayoría desordenados, hasta
que apareció un ejército de verdad disciplinado y al mando de un
general realmente bueno, Filipo de Macedonia, padre del que después
será Alejandro, el grande (el magno). El mismo Filipo que encargó a Aristóteles la educación de ese niño.
Filipo asedia Bizanzio y
a muy poco estuvo de conquistarla. Quiere la historia que un guardia
de las torres superiores alcanza a vislumbrar un avance nocturno,
gracias al brillo de la luna creciente y venus que está al medio del
arco de la luna que se abre paso entre las nubes.
Alcanza a dar la alarma y salva a su ciudad de caer
en manos de los macedonios.
Se acuñan monedas con la luna y la
estrella, para recordar la batalla. Se cuenta esta historia durante generaciones.
Siglos de enceñanzas se suceden, en
las escuelas se recuerda la batalla, esa noche y el favor que la luna
y venus le hacen a la ciduad, se graban en memoria colectiva de un
pueblo que rinde culto a esos dos astros y a esa noche,
inmortalizándola.
La historia es interesante. Siempre el nombre propio agrega color.
Pero también oculta las miles de historias individuales de remeros, comerciantes y esclavos.
Por ahi el unico cometido de la historia es resaltar al rey. A Bizas y a Filipo.
Posteriores monarquías aprovecharán esta tendencia a poner nombres a los procesos históricos, siempre en provecho de los bizas y filipos.
Querido amigo. Me trae hasta acá la publicación de tu 504, y a través del clarín tu mención a la ciencia ficción cordobesa, ya mismo me voy a meter en este, presiento, conspicuo género de la literatura argentina con mucho gusto. Ya de por sí el recuerdo de este compendio de la historia universal asimoviana me valió el esfuerzo. Un saludo enorme de un ciencioficcionita bonaerense.
ResponderEliminarAmigo nestor, un lagrimon me recorre la mejilla al ver al genial rodolfo walsh. soy apenas un aficionado en este metie!
ResponderEliminarBienvenido y que le aproveche, esta hecho solo con la intencion de despertar alegrìas
Muy bueno el aviso Marco!!!! voy a leerte y te comento....si queres pasar por mi blog, estás invitado! un abrazo hermano...
ResponderEliminarmuy buena la entrada "constantinopla"...te corrijo, es vasco en lugar de basko, donde nombrás a la mariposa.
ResponderEliminarHola panza arriba, recien veo este comentario que no respondí te pido disculpas.
ResponderEliminarla explicación a esto es que vazco en vazco, se escribe BASKO
abrazos y no dejes de leer esta genial obra maestra
http://axxon.com.ar/c-CuentoGuTaGutarrak.htm